La persona de Jesús se nos es revelada a través de un encuentro con Él y es el único que es capaz de transformar nuestras vidas. Jesús no es una persona que se descubre, sino que es una persona que se experimenta. En esta prédica el Apóstol Guillermo Maldonado nos enseña que Jesús no es un personaje ficticio del que sólo se lee, sino que es una persona que está viva.